jueves, 25 de junio de 2015

Las quejas en Twitter predicen la mortalidad por enfermedad cardíaca

Hay estudios que nunca dejarán de sorprenderme, no por los resultados, sino porque a alguien le de por hacerlos. Aquí un ejemplo: Psychological Language on Twitter Predicts County-Level Heart Disease Mortality. En español sería: El lenguaje psicológico en Twitter predice la mortalidad por enfermedad cardíaca por regiones. 

Básicamente los científicos del estudio han analizado 826 millones de tweets. De esos seleccionaron 146 millones que tenían localización geográfica. Sobre esta muestra realizaron un análisis buscando frases negativas sobre trabajo, salud o estado emocional. También buscaron frases positivas como las que incluían las palabras "oportunidad" o "fin de semana". Después estudiaron la correlación entre el "buen rollo" en Twitter y la mortalidad debido a factores cardíacos. El resultado fue que correlacionaban bastante bien, de hecho correlaciona mejor que ciertos factores clásicos como el tabaquismo. 


Mortalidad por factores cardíacos y la predicción de Twitter
Por supuesto, esta correlación no implica causalidad. No es que quejarte en Twitter haga que te de un infarto. De hecho, ya que la mayoría de los usuarios de Twitter durante el periodo del estudio (2009-2010) eran gente joven, los que se quejaban y los que morían no eran los mismos. Lo que el estudio parece indicar es que las quejas en Twitter son un buen reflejo de la calidad de vida en cada region, y que la calidad de vida afecta fuertemente al riesgo cardiovascular. 

Así que ya sabéis. Si queréis quejaros hacedlo, no vais a morir por ello, pero permitiréis que investigadores externos evalúen bien la calidad de vida en vuestra región.


Visto en ArsTechnica

miércoles, 17 de junio de 2015

Sobre la supuesta base de la bioneuroemoción en la física cuántica

En los últimos años ha aparecido una nueva pseudociencia denominada "bioneuroemoción" (anteriormente "biodescodificación"), que suele utilizar conceptos de física cuántica para justificar su supuesta eficacia. Es complicado el análisis de la supuesta terapia, ya que como suele ocurrir con estas pseudociencias la información se encuentra bastante oculta y cambia continuamente. Sin embargo, basta con ver los discursos de sus defensores, como Enric Corbera, o leer en su web la serie de "expertos" que la apoyan para apreciar la carencia de base de esta pseudociencia [1].

Es muy común en los últimos años el utilizar conceptos de la física cuántica para vender pseudociencias y medicinas alternativas sin base científica. Esto se realiza mediante la distorsión de la ciencia para adaptarla al producto a vender, y aprovechando el desconocimiento de la población sobre este campo de la ciencia. Como físico cuántico, con casi 10 años de experiencia en el campo, me preocupa este fraudulento uso de mi disciplina.

Por estos motivos declaro lo siguiente:

Decoherencia debido a la gravedad

La decoherencia es el proceso por el que un sistema pierde sus propiedades cuánticas al interaccionar con el entorno. Sobre esos ya hablamos en esta entrada: ¿Qué es la decoherencia cuántica? Este proceso, junto al pequeño valor de la constante de Planck, es el principal responsable de privarnos de los interesantes fenómenos cuánticos en el mundo macroscópico en el que vivimos. 

La idea es sencilla. Un sistema cuántico interacciona con otro y se forma entrelazamiento entre ellos. Este entrelazamiento lleva consigo información sobre el estado del primer sistema, y eso hace elimina cualquier superposición que pudiera tener. 

Sin embargo, parece que un sistema externo no es necesario, y eso es lo que han demostrado en un reciente artículo unos amigos de Viena. El artículo en cuestión se titula Universal decoherence due to gravitational time delation. La idea detrás del mismo tampoco es complicada. Imaginemos una molécula de un tamaño considerable. Esta tiene distintos grados de libertad, tanto intrínsecos como extrínsecos. Más concretamente, la posición del centro de masas de la molécula es un grado de libertad extrínseco. Las vibraciones de las distintas partes de la molécula dependen de la temperatura de la misma, y forman los grados intrínsecos. En principio, parece obvio que estos grados de libertad son independientes, de modo que las vibraciones en la molécula no dependen de su posición.

Sin embargo, esta independencia de los grados de libertad no es cierta si la molécula se encuentra en un campo gravitatorio. En ese caso, distintas partes de la molécula sufren distintas gravedades. ¿Cómo puede afectar esto a la molécula? Mediante la dilatación temporal. 

jueves, 11 de junio de 2015

La medicina sí es una ciencia, doctor Gérvas

Recientemente he leído un artículo en Acta Sanitaria del doctor Juan Gérvas titulado "La medicina como ciencia: menos arrogancia, que tiene poca ciencia".  Tal artículo es una defensa de las medicinas alternativas arropada en una crítica a la ciencia mediante el uso de la falacia relativista, de la que ya hemos hablado otras veces por aquí. Esta falacia funciona de la siguiente manera:

1. Las cosas son ciertas o falsas.
2. La ciencia se equivoca, ergo es falsa.
3. Como la ciencia es falsa cualquier alternativa a ella será igual o mejor.

Por supuesto tal argumento hace aguas, al ser incorrecta la primera premisa. Las cosas no se deben clasificar simplemente en correctas o falsas, ya que hay afirmaciones más verdaderas que otras. Si alguien afirma que la Tierra es plana se equivoca. Si afirma que es esférica también. Ambos errores no son iguales, ya que la esfera se aproxima más a la forma real de la Tierra que el plano. Por supuesto, que la Tierra no sea plana ni exactamente esférica no hace que cualquier afirmación alternativa, como que es una pirámide, sea correcta. Sobre esta falacia y sus errores se han escrito gran cantidad de artículos en las últimas décadas, como La Relatividad de los Errores, de Asimov, o El Divulgador Frente al Relativismo, de César Tomé.